Aumento al salario fue un consenso entre gobierno, patrones y trabajadores: CCE
El Consejo Coordinador Empresarial (CCE) Chihuahua, Coparmex Chihuahua y Canacintra Chihuahua, celebraron el acuerdo mediante el cual se aplicará un aumento del 20% al salario mínimo en 2024, al tiempo que hicieron un llamado al Gobierno Federal para generar las políticas necesarias a fin de incentivar el crecimiento y productividad de las empresas.
Federico Baeza Mares, presidente del CCE Chihuahua, refirió que las representaciones del gobierno, la patronal y la laboral llegaron a este acuerdo, por lo que desde el CCE, son respetuoso en este sentido al considerar que significa “un gran alivio para la fuerza laboral, específicamente para los colaboradores de menores ingresos”.
El líder empresarial expuso que en esta ocasión, los sueldos por arriba del salario mínimo no irán en aumento con base en este incremento del 20%; sino que será un año diferente. Recordó que normalmente se hacía un gran esfuerzo para empatar el aumento del salario mínimo con el resto, pero apuntó a que este año, sería complicado lograrlo, por lo que se calcula que entre el 90-95% de los salarios regulares se moverían conforme a una similitud a la inflación, pero que todavía no está confirmado.
Sin embargo, Baeza Mares resaltó que este es otro gran paso para aquellos que obtienen el salario mínimo, recalcando que no es un logro del Gobierno Federal, puesto que se trata de un consenso entre tres partes, sobre todo de la laboral y la patronal, mientras que el gobierno es una clase de réferi.
Salvador Carrejo Orozco, presidente de Coparmex Chihuahua, coincidió en que dicho acuerdo se alcanza por unanimidad de los sectores involucrados que tienen presencia en la Conasami: sector productivo (representado por organismos empresariales), el sector de los trabajadores, y el gobierno.
Resaltó que esta medida se logra con el compromiso del sector empresarial a pesar de un entorno complejo desde el punto de vista económico, de las presiones a las cuales ha estado sometido el sector empresarial, y de la incertidumbre que existe en periodo electoral.
Es de precisar que Coparmex tiene el objetivo de implementar una nueva cultura salarial, cuya meta es llegar al 2026 de manera tal que el salario mínimo alcance para sobrepasar la línea de bienestar familiar, esto es, que el salario mínimo alcance para dos canastas tanto alimentarias como no alimentarias.
“Quizá además de celebrar que esto se logra de manera unánime, creo que es importante enfatizar que el gobierno federal muestre una política favorable hacia las empresas y ello se traduzca en iniciativas que impulsen la competitividad y productividad de las empresas. Las empresas requieren con urgencia iniciativas en el sentido de la desregulación o proyectos de mejora regulatoria, así como incentivos fiscales, pues si no atendemos esta necesidad que tienen las empresas, difícilmente el sector empresarial podrá seguir proporcionando estas condiciones favorables para los colaboradores”, manifestó.
Al ser cuestionado sobre qué prevén ante este escenario, Carrejo Orozco respondió que proyectan una condición económica cada vez más restringida para las empresas, por las condiciones propiamente del entorno económico, pero también por las distintas iniciativas de Ley que han sido aprobadas en materia laboral y que han incrementado de manera significativa los costos de operación de las empresas.
En tanto que Armando Gutiérrez Cuevas, presidente de Canacintra Chihuahua, apuntó que desde este organismo, siempre han estado de acuerdo en incrementar el nivel de ingreso de los colaboradores de las empresas, añadiendo que esta última alza al salario mínimo se suma a una de muchas iniciativas en donde han apoyado el desarrollo pleno de los trabajadores.
Evidenció que, en lo general, la industria ya paga superior al salario mínimo, por lo que el impacto es menor, aunque reconoció que sí hay unos pequeños sectores que se verán afectados. “En este sentido, estamos cerca de una estabilización, no vemos sostenible que se sigan aumentando el salario a ese ritmo cada año. Este año aguanta bien, pero hacia próximos años hay que hacerlo más gradual”, dijo, y abundó que el tema pendiente sigue siendo la política de apoyo a la productividad de las pymes.
Por otro lado, consideró importante mencionar que a la industria manufacturera que vende en dólares, este año tuvo ya un incremento de alrededor de 15% en sus costos de depreciación porque aumentaron los costos en pesos, pero la capacidad de ingresos disminuyó por el tipo de cambio.
Asimismo, de cara al futuro, consideró trascendental observar cómo se mejorará el sistema educativo, para que el salario mínimo esté acompañado de personal con más habilidades y capacidad de ser más productivos y crear más riqueza.
Finalmente, expuso que se debe tomar en cuenta que este incremento al salario también tiene un efecto recaudatorio, ya que se incrementan las aportaciones patronales a impuestos, por lo que declaró que ayudaría más si a los trabajadores se les descuenta menos ISR; y que se debería mejorar los servicios de salud para incentivar la formalidad.